TAN LEJOS Y TAN CERCA EL 15 de enero del 2018 volvieron los judíos con
el gobernador Pilato a asesinar a Jesucristo, se repitió la historia, más allá
del otrora y en tiempos de la tecnología computarizada. Jesucristo somos todos
y por el morimos y sufrimos.
OSCAR DICE:
Tan lejos y tan cerca está mi espíritu guerrero, tan lejos y tan cerca
mi voz y mi espada, en los momentos cuando mordió la oscuridad aterradora, yo
el paladín de plata, lloré con mi espada de doble filo en las manos tensas, antes de caer
abatido por un tizón de luz bruñida y pólvora, lloré, mas no por mí, lloré por
mis hijos, mi esposa, mi familia, después lloré por mi gente y su patria empobrecida,
por los que no quieren saber que están condenados y se resignan a comer de la
basura, a entregar a su descendencia al polvo, al agua y a la arena del desierto. Adormecido por las
penurias más sentidas, antes de perder el último hálito de vida te vi a ti,
enjuiciando mis actos de bondad y de amor por los seres que más amas, antes de enturbiar
mi alma y bajar al seol te vi abatir sobre mis carnes tus colmillos de lobo
harapiento y con saña inaudita enterrarlos con saña indescriptible en mi
pensamiento de libertad.
Cuando todo lo hice por ti, me olvidaste, me dejaste maniatado en un
desierto de alimañas, aquel cuento carretero sobre mis actos incorruptible lo creíste
de tus adversarios, de quien en verdad te están matando, no solamente de
hambre, también del espíritu cuyo te lo ha tornado ruin, cobarde y miserable.
EL 15 de enero del 2018 volvieron los judíos con el gobernador Pilato a
asesinar a Jesucristo, se repitió la historia, más allá del otrora y en tiempos
de la tecnología computarizada. Jesucristo somos todos y por el morimos y
sufrimos.
El paraíso de los pobres está sufragado en un océano de furias. Mas el
paraíso es para los de mente amplia, el paraíso prometido es para los
valientes, el paraíso es para todos aquellos que no son complacientes a quien
los engaña, atropella, divide e induce que se maten unos a otros como bestias silvestres.
Tan lejos y tan cerca está mi espíritu, las memorias más intensas, el
guerrero y sus venas, su resuello, virtud y honra, aunque ya estoy más lejos
que cerca, estaré presente cuando todo esto llegue a su fin y Nicolás Maduro Moros pague mi muerte con venganza y justicia de la la tierra y del cielo.
Mañana no será, pero un día todo terminará, nada es eterno en este
mundo.
